El monto total que el Gobierno ha destinado para atender el Fenómeno El Niño -en tandas distribuidas desde abril de este año- ha sido de poco más de 4 mil millones de soles en todos sus niveles [local, regional y nacional].
Casi el 80% de este monto está concentrado en cuatro ministerios, según información de la Contraloría General de la República: Presidencia del Consejo de Ministros; Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento; Ministerio de Defensa y Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego. Ninguno de las cuatro carteras mencionadas ha utilizado siquiera la mitad del dinero que se les asignó, según cifras públicas del Ministerio de Economía.
Lentitud en ejecución presupuestal y disparidad entre regiones
El ministerio que más ha avanzado en ejecución presupuestal, hasta el cierre de este informe, ha sido el de Defensa. A esta cartera se le otorgaron 986 millones de soles, de los cuales ha definido contratos de obras por 800 millones, pero ha ejecutado solo el 48.6%, según el portal de Consulta Amigable del MEF.
Este dinero ha sido destinado a actividades como planeamiento, supervisión, compra de equipos y maquinaria, limpieza de ríos, entre otros, indica un informe del Instituto Peruano de Economía (IPE).
En tanto, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) es otro de los sectores que más ha avanzado en la ejecución de obras, a través de la Autoridad Nacional del Agua (ANA). «Estos recursos, específicamente los del ANA, están destinados a servicios de control de inundaciones y defensas ribereñas (limpieza y descolmatación de ríos), y a la compra de maquinaria necesaria para realizar dichas actividades», explica Gonzalo Manrique, economista del IPE. Sin embargo, hasta la publicación de este informe, de este presupuesto solo se había ejecutado el 44% del dinero recibido.
Si hacemos una comparación entre regiones, existen amplias diferencias entre ellas. «En Lima y Lambayeque se ha logrado un avance cercano a 60%. Sin embargo, en Áncash solo se ha ejecutado el 26% y en Ica, el 26%», advierte el especialista. De ahí que el promedio sea menor al 50%.
Un detalle a considerar es que el dinero que no se utilice este año deberá devolverse al presupuesto público, salvo que se emita una norma o decreto de urgencia que amplíe el tiempo de uso de dicho dinero, que aún está disponible.