La Policía de Argentina desbarató el último martes una organización criminal con ramificaciones en Estados Unidos y en Uruguay y que operaba como una secta de trata de personas, varios de cuyos integrantes fueron detenidos y se negaron a prestar declaración judicial, informó la agencia Efe.
Tras ello, el tenor Plácido Domingo ha sido involucrado en este caso. Según un informe del diario español El País, el cantante fue “lo que parece ser un cliente” de los servicios sexuales que ofrecía la secta, camuflada en una escuela de yoga de Buenos Aires.
En una serie de audios, obtenidos tras la orden del juez a cargo de la investigación Ariel Lijo, se escucha a un cliente explicando cómo debía darse el encuentro.
La conversación participa un hombre, que sería el tenor Plácido Domingo, y una mujer llamada Susana Mendelievich, alias Mendy, de 75 años. Luega, esta se comunica con el líder de la secta y celebra que el cliente, presuntamente Plácido Domingo, ya “ha organizado la matufia” [un engaño] para que “los agentes no se den cuenta”.
Cabe anotar que Plácido Domingo no está imputado por algún delito, pero el medio indicó que aún faltan revisar una gran cantidad de documentación.
Más audios
El audio conta de tres partes: en la primera, Mendy y Juan Percowicz, líder de la secta detenido el pasado viernes junto a otra veintena de personas, resuelven aceptar el encargo del hombre que realiza la llamada.
“Plácido dijo que podía venir a visitarnos, es decir, que va a venir a visitarme. Porque él va a casa en Nueva York y lo recordó ayer”.
De acuerdo al medio, para Percowicz este encuentro era de suma importancia, por lo que autoriza el uso del Museo, como llamaban a un edificio del centro de Buenos Aires acondicionado para encuentros sexuales.
En el segundo audio, se escucha supuestamente a Plácido Domingo dando indicaciones a Mendy.
“Cuando salgamos de la cena venimos separados, lo hacemos así porque mis agentes se van a subir a la habitación cuando yo suba y se van a quedar en el mismo piso”, comenta el hombre y le indica a la mujer el número de habitación en la que se deben encontrar.
En el último audio, Mendy vuelve a llamar a su jefe Percowicz.
“Ya me llamó y armó la matufia para que me quede en el hotel sin que los agentes se den cuenta”, le dice a Percowicz.
“Qué degenerada que sos”, celebra su interlocutor.
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