Por Dante Pacheco:
La muerte de un pequeño que no acababa de cumplir los dos años tras una presunta negligencia en el hospital San Juan Bautista, pone una vez más sobre el tapete la condición en que se encuentra este nosocomio que le costó mucho a los Huaralinos para que se crease y que ahora -de un tiempo a esta parte- se haya convertido en una institución de la que todos desconfían y que despectivamente se le llama el “hospital de la muerte…” nuestro centro hospitalario no merece estas calificaciones, por el contrario, hay que sacarla de donde está, por lo que se requiere tomar medidas urgentes.
Para emprender el camino de la recuperación primero tiene que haber un “mea culpa” por parte de las propias autoridades del nosocomio, luego identificar a los malos médicos y demás personal hospitalario que le está haciendo mucho daño a la institución y al pueblo; paralelamente solicitar a las autoridades de la DIRESA que determine una reorganización total del hospital de Huaral a fin de que se permita efectuar un diagnóstico real de la condición del personal médico y demás, identificar las necesidades más urgentes, implementar nuevas especialidades, contratar nuevo personal y remover a todo aquel que se ha convertido en un lastre, incluyendo al personal administrativo y mantener a quienes están calificados para continuar en sus respectivos puestos.
Esto no significa que las denuncias por presuntas negligencias deban esconderse, por el contrario, se debe ser inflexible en la búsqueda de responsables cuando existen denuncias como las del niño y que para las explicaciones del caso debiera dar la cara el Director Juan Díaz Amado que hasta el momento pretende esconderse de la prensa y de la propia población y ni siquiera ha sido capaz de pronunciarse vía comunicado a los familiares y a la población en general, es decir que el hospital atraviesa por una grave enfermedad, también esta como un paciente en coma; pero no podemos hundirlo, por el contario tenemos que levantarlo y para ello debe de salir todo personal negativo, médico, asistencial, administrativo, etc.
Lamentablemente es notorio que así como tenemos malos médicos también los ay de los buenos, de igual manera en el sector asistencial donde enfermeros y enfermeras nombrados te miran por sobre el hombro se sienten seguros en sus plazas importándoles un pepino lo que les ocurre a los pacientes, existe una gran insensibilidad que a la vez es contagiosa, en realidad son pocos los que aman su profesión y a esos pocos junto con la institución como tal es que debemos salvar… basta ya de nombramientos políticos, los directores deben elegirse vía concurso al igual que los demás cargos, de lo contario el compadrazgo seguirá dejando dolor y muerte, basta de aplicar el espíritu de cuerpo en este tipo de situaciones. La población exige investigación severa y sanción a los responsables, pero no olvidemos que eso no será suficiente para recuperar nuestro nosocomio… para qué queremos la construcción de un nuevo hospital si nos quedamos con los mismos médicos, enfermeros o administrativos malos, separemos la paja del trigo y salvemos nuestro primer centro hospitalario, exijamos a nuestras autoridades que así sea… ahora o nunca.
ENFOQUE REAL 