Las autoridades lograron capturar a un clan familiar que tenía en la mira a varios conductores de transporte público. La detención se produjo el mismo día que se llevó a cabo el paro de transportistas. Los detenidos tenían su base de operaciones en San Juan de Lurigancho.
Según investigaciones, los extorsionadores exigían a las empresas de transporte el pago de 3000 soles por cada jornada. Asimismo, se dio a conocer que los detenidos tienen antecedentes por tenencia ilegal de armas de fuego y explosivos.