Dos hombres fueron asesinados a balazos y abandonados en un descampado ubicado en el cruce de las avenidas Josefina y Prolongación Naranjal, en el distrito de San Martín de Porres (SMP).
Los cuerpos, hallados maniatados y con signos de tortura, permanecían tendidas sobre la tierra seca de una zona sin alumbrado, lo que revelaría una ejecución premeditada.
El hallazgo fue realizado por agentes del Serenazgo y peritos de criminalística, quienes llegaron tras recibir llamadas de vecinos alarmados por los fuertes sonidos de disparos registrados durante la noche. En el lugar se encontraron más de 15 casquillos de bala, lo que evidencia la ferocidad del ataque.
Testigos señalaron a medios locales que escucharon gritos de auxilio antes de los disparos. Alertados, salieron de sus viviendas y observaron la escena: dos cuerpos inmóviles y una mototaxi que rápidamente se alejaba hacia dirección desconocida. Todo apunta a que las víctimas fueron trasladadas hasta el descampado específicamente para ser ejecutadas allí.
Los agentes de la Policía Nacional acordonaron la zona y comenzaron las diligencias correspondientes. Las condiciones de los cuerpos —maniatados, con golpes, cortes y múltiples impactos de bala— han llevado a los investigadores a sostener la hipótesis de que se trataría de un ajuste de cuentas, un modus operandi recurrente en crímenes vinculados a organizaciones delictivas.
Aunque las víctimas aún no han sido identificadas oficialmente, las autoridades indicaron que, por sus características y por información preliminar recogida en la escena, se trataría de ciudadanos venezolanos.
La Policía ha iniciado operativos en los alrededores y revisará cámaras de videovigilancia de las vías cercanas para intentar identificar la mototaxi utilizada en el traslado de las víctimas. Hasta el cierre de esta nota, no se ha reportado ningún detenido.
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