La Fiscalía acaba de dictar 18 meses de prisión preventiva contra Hialmar Enrique Laynes por el presunto delito de extorsión en agravio contra hasta siete mujeres periodistas.

Como se recuerda, en junio del 2024, el mencionado sujeto fue denunciado por casi una decena de comunicadores, que lo acusaban de haberlas amenazado a ellas y a sus familiares.

Ximena Carrasco, Manuela Camacho, Trilce Reyes y María Fernanda Montenegro, entre otras, decidieron hacer públicas sus denuncias contra el ‘extorsionador de periodistas‘.

La medida fue adoptada por el Poder Judicial este viernes 6 de junio de 2025, en respuesta a los elementos de convicción presentados por el Ministerio Público (mensajes por redes).

En las pesquisas, la Segunda Fiscalía Penal Supraprovincial en Derechos Humanos descubrió que Hialmar Enrique Laynes habría presionado a sus víctimas para tener encuentros sexuales.

Esto, a través de cuentas falsas o identidades manipuladas que utilizaba para agregar a periodistas mujeres en conversaciones grupales de aplicaciones como WhatsApp y Telegram. 

El análisis forense de los dispositivos electrónicos incautados, así como los testimonios de las agraviadas, permitieron establecer el vínculo entre el imputado y los hechos denunciados.

Estas evidencias fueron determinantes para que el Poder Judicial aceptara la solicitud de prisión preventiva por riesgo de fuga y posible obstaculización del proceso solicitada por Fiscalía.

Un hombre, que presuntamente intentaba realizar un acto de extorsión, sufrió la explosión de un artefacto de dinamita en sus propias manos mientras caminaba por el pasaje Los Cocos, en el paradero 3 del Ermitaño, ubicado en el distrito de Independencia.

SOBREVIVIÓ DE MILAGRO

Imágenes de cámaras de seguridad registraron al sujeto caminando con el explosivo en sus manos. Minutos después, el artefacto estalló, dejándolo gravemente herido y tendido en el pavimento. A pesar de su estado, el presunto malhechor logró trasladarse a su vivienda, ubicada a unas tres cuadras del lugar. Sus familiares, al percatarse de su grave situación, intentaron llevarlo a un hospital.

Cabe mencionar que, el pasaje Los Cocos alberga dos negocios cercanos: una heladería y un taller textil. Se sospecha que el hombre planeaba detonar el explosivo en uno de estos establecimientos como parte de un acto de extorsión, aunque esta hipótesis sigue bajo investigación.

Algunos vecinos señalaron que el individuo no estaba solo, y que otra persona habría huido de la escena tras la detonación.

En Huanchaco, región La Libertad, una mujer de 27 años ha sido detenida tras confesar haber matado a un hombre que fue a entregarle un ramo de flores de parte de un pretendiente y que pensó que se trataba de uno de los delincuentes que la vienen extorsionando y amenazando de muerte.

Ocurrió en el condominio San Francisco, en Huanchaquito. El cuerpo de Juan Alfredo Jiménez Zevallos, de 47 años, quedó tendido frente a la mz. J, lote 27. A un costado yacía el ramillete de flores naturales.

Cerca de allí, en una casa abandonada, se encontraba Morelia Elizabeth Agustín Juárez. Estaba llorando, desconsolada, y aún empuñaba una pistola Glock de serie DXZD618, calibre 9 milímetros Parabellum.

Al ser interrogada, presa de nervios, la joven explicó cómo había matado al hombre y el motivo: “Hace tiempo, un policía, me presentó a un amigo suyo, salimos, pero él se fue a Lima”, dijo inicialmente.

Y agregó: “Ese chico vino a visitarme y me mandó un ramo de flores con su tío, pero yo no lo conocía. El señor llegó a mi casa y le pregunté por WhatsApp quién me enviaba ese obsequio y me contestó que no me iba a decir, que era una sorpresa y que me lo entregaría personalmente”.

Indicó que tenía mucho temor porque, justo en esos instantes, la estaban extorsionando y amenazando de muerte.

«¿Por qué lo mataste?», le preguntó un policía de la comisaría de Huanchaco.

“Le juro, señor, que no fue mi intención, pensé que me iban a matar, justo en esos momentos me llamaron para extorsionarme, ahí está mi celular, ahí están las pruebas”, aseguró.

Morelia manifestó lo mal que se siente y aseguró ser sincera: «Le juro, señor, que me han estado amenazando, dicen que me quieren matar porque no colaboro con sus pedidos de dinero», detalló.

«Le disparé al tío del chico, no sé cuántas veces. Entendí en ese momento que nadie más me va a volver a tocar. Mi intención no era quitarle la vida, pero me nublé y no me dejó hacer algo limpio», explicó.

Edin, un usuario en línea, expresó su tristeza ante la materialización de la sociedad actual y manifestó su deseo de encontrar información sobre la identidad del padre afligido para ofrecer consuelo.

Esta reacción pone de manifiesto la necesidad de solidaridad y apoyo en momentos difíciles, especialmente para aquellos que luchan con recursos limitados.