Más escéptico que nunca con la clase política peruana, ¡Que todo cambie para que nada cambie!

«Prefiero el estado de progreso constante, con la meta al frente y no atrás», Bernard Shaw.

La degradación ética y moral de la política peruana me ha convertido en un escéptico, no en un indiferente, que no es lo mismo. La lucha que se libra en estos momentos, tan aciaga para el país, es una guerra, fratricida e insensata, que no nos conduce a ninguna parte.

Quienes apoyan y propugnan un cambio total, vía adelanto de elecciones, no le cuentan toda la verdad al pueblo, verbigracia: no le dicen que si la presidenta renuncia, por mandato constitucional asume el presidente del Congreso, general Wilians quien tiene que convocar a elecciones inmediatamente y que Martha Moyano sería la presidenta del Congreso.

Es decir, el Fujimorismo más radical asumiría el poder hasta que culmine el proceso electoral.

¿Creen ustedes que esta sucesión constitucional calmaría las protestas en el Perú?, yo pienso que no, al contrario, agudizaría las contradicciones.

Los radicales de izquierda sueñan con este escenario y por eso se oponen al adelanto de elecciones, ellos solo quieren que las contradicciones se agudicen, de tal manera, que les permita tomar el poder e implantar su sistema político totalitario y anacrónico, su dictadura soñada de Bermejo, el paraíso comunista de Bellido y Vladimir Cerrón.

Otro elemento que me llena de escepticismo, es el hecho de que aún, existiendo unas nuevas elecciones, tampoco se resolvería nada, y es que quienes participarían en este proceso electoral, serían los mismos que están en el Congreso , ¿creen ustedes, realmente, que de aquí a seis meses surja un líder lo suficientemente culto, concertador, preparado, tolerante, con una alta visión de país y con grandes valores democráticos?. yo creo que no, estoy convencido de que dentro de un año, estaríamos nuevamente con la monserga de que «fulano no me representa» y»cierre de congreso», es, lamentablemente, una historia sin fin, que solo nos va a conducir a un insondable abismo.

¿Cómo no ser escéptico,cuando la parasitaria izquierda de Cerrón en múltiples oportunidades ha pactado con la derecha más radical, cómo por ejemplo en el tema de la SUNEDU?.

¿Cómo no ser escéptico si por un lado tienes a una derecha fascistoide y por otro lado a una izquierda Staliniana, decididos a no conversar ni llegar a ningún acuerdo, en beneficio del país,?

¿Cómo no ser escéptico si están destruyendo el país y quienes tienen el poder solo responden con balas? ¿Cómo no ser escéptico si hay intereses subalternos, detrás de tanto vandalismo?, Porque lo que han hecho, durante todo este tiempo,, no es una legítima protesta, ya que tomar aeropuertos, incendiar comisarías, locales públicos y privados, amenazar a la población que quiere trabajar, eso no es protestar, eso es vandalismo puro y delictivo.

Y lo peor de todo es que estamos entrampados, no hay una luz al final del túnel, por ahora.

Espero que mi pesimismo schopenhaueriano no tenga razón, espero, por el bien del país, que salgamos de este aciago túnel, pero por ahora no diviso una salida a tan ominosa crisis, lo que demuestra la miseria moral de toda la clase política, la prensa y la siempre inconsecuente y omnivora clase empresarial peruana.

Nadie se salva ni siquiera quien escribe este artículo, al fin de cuentas contribuí con mi voto a elegir a un rufián que quiso convertirse en un supremo dictador.