POR DANTE PACHECO:
Si bien es cierto que le decisión de Ministerio de Cultura a través del INC, respecto a dejar sin efecto la declaratoria de Patrimonio Cultural de la Iglesia San Juan Bautista, ha generado controversias, el tema de fondo nos recuerda que en ciertos lugares no se procedió con rigurosidad para declarar monumentos históricos y demás. En Huaral, por ejemplo, hace algunas décadas se incluyó al Mercado de Abastos de 28 de Julio como Patrimonio Cultural, de tal forma que no se le puede tocar, ni siquiera para mejorarlo, no obstante que dicha declaratoria obedeció a intereses mezquinos de los dirigentes de entonces con la finalidad de perennizarse en dicho local en la creencia de que modernizarlo implicaba el desalojo de ellos, además de que por la fecha también se movieron hilos de la política también mezquina.
El tema surge como polémica cuando el ex Alcalde Melchor Cárdenas hablaba de reconstruir el Mercado y en su lugar levantar una infraestructura moderna de varios pisos donde además de ordenar a los mismos comerciantes en mejores condiciones, se proyectaba la construcción de otros ambientes, como auditorio y otros usos públicos. Los dirigentes apelaron a ciertas relaciones que tenían en el Congreso, a quienes agasajaban con jugosas pachamancas a fin de que se influyese en la declaratoria de Monumento histórico y Patrimonio Cultural de la Nación; es así que, bajo argumentos técnicos insatisfechos, como que era una de las pocas infraestructuras de ese corte y que fue una donación de China, finalmente se logró tal propósito, aunque mejor diríamos se logró ese despropósito. Las intenciones del ex burgomaestre se frustraron y hasta la fecha esa infraestructura, es sinónimo de insalubridad, descuido y abandono, quedó como un lunar en medio de la ciudad, la misma construcción es un peligro, y sus principales habitantes son los roedores.
Lo sorprendente de todo es que el aprovechamiento de los interesados fue más allá de lo que se pretendía, porque bajo el pretexto de esa declaratoria se incluyó injustificadamente la parte posterior del Mercado, es decir, toda el área donde se ubican puestos de venta en la Av. Solar hasta las cocinerías, que obviamente nada de eso tiene lo mínimo de monumento histórico; pero aún así lo de Patrimonio Cultural los incluye y por ello tampoco se les puede tocar. ¿A quién con dos dedos de frente, se le puede ocurrir afirmar que todo ese conjunto es un Patrimonio Cultural?
Es en ese sentido que la sociedad civil organizada o el propio Municipio puede iniciar un proceso de revisión de lo actuado a fin de que se determine técnicamente si ese lugar o precaria construcción china, es o no un monumento histórico… de no serlo, como creemos, se podría recuperar ese bien que le pertenece al pueblo y que merece ser remodelado y utilizado de la mejor manera, claro está, sin cometer abusos en contra de los actuales comerciantes que podrían conservar un espacio en mejores condiciones. Todo ese lugar podría convertirse en un gran complejo comercial con locales multiusos y darle la prestancia a la ciudad, capital de la agricultura.
ENFOQUE REAL 