El tema del mergapuerto será en adelante una frase que usaremos en adelante con gran frecuencia, toda vez que solo el anuncio de que empezara a funcionar en el mes de Noviembre genera interés supremo, tanto por empresarios como por los pobladores afectados en razón de que la inversión chino -peruana, es extraordinaria pues superará finalmente más de 3500 millones de dólares, remarcando que la empresa peruana está representada por la Volcán, mientras que la china es Cosco Shipping del estado, lo que significa que la cosa es seria.
Sin embargo el mega proyecto sigue generando preocupaciones, particularmente el de la contaminación ambiental que adicionalmente a lo que tenemos por el tema de la construcción, también se dará con la presencia de residuos sólidos o basura, además de las aguas residuales, todo esto a raíz de que las ciudades de Huaral, Chancay y Aucallama sufrirán con el aumento singular de su población, estimándose que un primer momento, entre cinco y diez años la provincia quintuplicará el número de sus habitantes, entonces hablaremos de entre cuatrocientos y quinientos mil habitantes en lugar de cien mil y ello provocará una mayor emisión de residuos sólidos, mayor consumo de agua y por ende abundancia de residuos líquidos o desagüe… lo preocupante de todo ello es que ninguna de las ciudades de directa influencia cuentan a la fecha con plantas de tratamiento, ni para aguas residuales ni para residuos sólidos.
Ante esta realidad, la ciudad capital de la provincia tiene la construcción de una PTAR abandonada en procura de que se logre una conciliación con la empresa que se fue a un arbitraje por la cancelación unilateral del contrato. Tampoco se tiene una panta donde se pueda tratar la basura, ni para residuos inorgánicos ni para los orgánicos, es decir que estamos en nada y no tenemos ni siquiera indicios de que esto se tratará en el menor tiempo, solo la municipalidad de Huaral luchando por arreglar el problema que le dejó la anterior gestión con la empresa que no ha podido continuar
con la obra de la PTAR y sin que el Ministerio de Vivienda se pronuncie formalmente, pero tampoco se habla de los residuos sólidos porque para estos casos la inversión también es millonaria, aunque no está lejos la posibilidad de que para la basura se pudiese entregar ese servicio a un privado, sobre todo sabiéndose que algunos empresarios ya tocaron la puerta de la Municipalidad para alcanzar ese propósito.
Ni Huaral ni las otras ciudades cercanas podrán tener obras de agua mientras no se cuente con una PTAR, por lo que es urgente que intervenga el Gobierno Central que hasta el momento solo aparecen para la foto y nada más. No juguemos con el futuro de nuestros hijos o de las próximas generaciones.
ENFOQUE REAL 