El Congreso de la República se encuentra al borde de una nueva crisis política. El congresista Pasión Dávila de la Bancada Socialista presentó una moción de censura contra José Jerí y los integrantes de la Mesa Directiva, a quienes responsabilizan por la represión policial durante la marcha nacional del 15 de octubre, en la que asesinaron el joven Eduardo Ruiz Sanz.
La iniciativa consiguió sumar las 20 firmas necesarias que exige el Reglamento del Congreso para ser presentada. Ahora debera tener la mayoría de congresistas hábiles para ser admitida al debate. Cabe indicar que una vez presentada, la moción deberá ser puesta en agenda y debatida en el Pleno hoy mismo por tener prioridad.

Según el documento, la Mesa Directiva encabezada por Jerí “ha perdido toda legitimidad del Parlamento y refuerza la percepción de que los partidos políticos actúan en función de sus intereses particulares y no del bienestar de la Nación”, en alusión a que Jerí asumió el cargo tras la vacancia de Dina Boluarte.
El Primer Vicepresidente encargado de la Presidencia del Congreso de la República, Fernando Rospigliosi, a través de sus redes sociales, manifestó su rechazo a ceder a una censura pese al asesinato del joven manifestante. «Otra vez han provocado disturbios y caos, atacando ferozmente a la policía con el único propósito de capturar el poder. ¿Cederemos nuevamente? En 2020 lo lograron y la consecuencia han sido 5 años de Castillo/Boluarte», escribió.
De prosperar la moción, José Jerí dejaría debería renunciar inmediatamente la presidencia del Congreso y la jefatura del Estado, y el Congreso tendría que elegir a una nueva Mesa Directiva, en la que el Presidente del Congreso asuma momentáneamente la Presidencia Interina de la República.
Pimer ministro de José Jerí, criminalizaba marcha de la Generación Z: «Es un intento subversivo»
El primer ministro de José Jerí, Ernesto Álvarez, se sumó al discurso que busca desacreditar la protesta ciudadana. Desde sus redes sociales, Álvarez insinuó que la jornada no tendría un carácter democrático, sino desestabilizador. Minutos antes de juramentar como titular, eliminó su cuenta de X.