Una escena devastadora ha conmocionado profundamente a los vecinos de la urbanización Bautista, sector Los Jardines, en la ciudad de Huaral, donde la Policía Nacional del Perú halló los cuerpos sin vida de una madre y su pequeño hijo, ambos enterrados dentro de su propia vivienda.
El primer hallazgo se produjo alrededor de las 9:00 de la noche del domingo 9 de noviembre, cuando agentes policiales encontraron el cadáver de María Pérez Tarifeño (39), quien permanecía envuelta en plástico y enterrada en el interior de la vivienda.
Horas más tarde, a las 11:50 de la noche, los efectivos ubicaron el cuerpo de uno de sus menores hijos, lo que confirmó la magnitud de este crimen que ha sacudido a toda la comunidad huaralina.
PRESUNTO ASE**SINO HABRÍA CONFESADO:
El presunto victimario, Luis Ordinola, de 28 años, confesó a la Policía Nacional del Perú, ser el autor del cruel asesinato de su pareja, María Pérez Tarifeño (39), y de los dos pequeños hijos de ella: una niña de 9 años y un niño de 4.
Según fuentes oficiales, se sabe que el Ordinola habría golpeado brutalmente a las víctimas, dejándolas aparentemente inconscientes. Luego, en un acto de frialdad indescriptible, excavó un hueco de aproximadamente tres metros debajo de la escalera de la vivienda, ubicada en la urbanización Bautista, sector Los Jardines, donde arrojó los cuerpos —al parecer aún con vida— uno sobre otro, para finalmente cubrirlos con piedras y tierra en un intento de ocultar su atroz crimen.
El horror fue descubierto tras varios días de búsqueda, luego de que familiares reportaran la desaparición de María y sus hijos. La Policía Nacional del Perú, tras intensas diligencias, halló los cuerpo de la madre y de los de los menores, confirmando una de las tragedias más dolorosas que ha vivido la comunidad huaralina en los últimos años.
Vecinos y familiares, entre lágrimas e indignación, exigen justicia y cadena perpetua para el responsable. “No hay palabras para describir tanto dolor. Eran una madre trabajadora y dos angelitos que no merecían esto”, expresaron conmovidos.
El caso se encuentra en manos del Ministerio Público y la División de Investigación Criminal de Huaral, que continúan recabando pruebas y declaraciones para formalizar la acusación por feminicidio y homicidio calificado en agravio de menores de edad.