En la más reciente edición de Agromin, Juan Carlos Guzmán, superintendente de Responsabilidad Social de la Minera Colquisiri, aseguró que, con un trabajo responsable, sí se puede desarrollar la convivencia entre la agricultura y la minería, con la garantía de que ambas actividades salgan bien y con un impacto favorable para la población de su alrededor.
El representante de Colquisiri contó que esta empresa, ubicada en el Valle de Huaral desde hace más de 40 años, ha logrado la convivencia agrominera con el uso de tecnologías de alto nivel para el uso del agua y la protección del medio ambiente, lo cual ha permitido desarrollar más de 10 mil hectáreas de cultivos agrícolas.
“El reto es que las personas puedan conocer que, a 50 metros de la mina, tenemos un fundo agroexportador de 60 hectáreas donde se producen mandarinas que se llevan a la exportación a Asia, Europa y Norteamérica. Además, convivimos con muchos pequeños agricultores de productos de pan llevar y frutales”, dijo Guzmán.
Explicó que este trabajo es posible gracias a los pilares fundamentales de la empresa, que son la convivencia y el respeto, lo cual comprende que las operaciones mineras se lleven a cabo con los más altos estándares para garantizar el respeto al medio ambiente y hacer un uso eficiente del agua.
“Hemos podido implementar una planta de tratamiento de aguas residuales que nos permite reusar el agua que se utiliza en las operaciones, tenemos cero vertimientos, y así podemos generar campos forestales de más de 20 hectáreas donde hay más de 5 mil árboles”, comentó.
Asimismo, indicó que la minera aporta al desarrollo de la localidad del valle de Huaral con proyectos de responsabilidad social enfocados en los ejes de salud y nutrición, educación y desarrollo local. Así, por ejemplo, se realizan talleres productivos y capacitación a emprendedores, mejoramiento de infraestructuras, entre otros.


