Los agentes de la Brigada Especial Contra la Criminalidad nacional y extranjera filmaron la confesión que dio anoche Jean Piero García Cipriano, investigado por secuestrar y cortar los dedos al hijo de un empresario minero al que tuvieron cautivo seis días y por quien exigían 2 millones de dólares por su liberación, en Trujillo, región La Libertad.

Tras su declaración, los investigadores determinaron que quien dio la orden para cometer este plagio fue Jhonsson Smit Cruz Torres, líder de ‘Los Pulpos’ involucrado en múltiples asesinatos y otros delitos como el sicariato, extorsión, cobro de cupos y venta de drogas suscitados en Perú y en Chile.

Con una tranquilidad pasmosa, ante la cámara de un celular, este delincuente de 21 años, conocido con el alias de ‘culo chueco’, dijo cuál fue su participación en el secuestro de Robert Linder Quezada Crisólogo, un joven de 26 años, hijo de un empresario trujillano. Él fue plagiado el 11 de agosto mientras se dirigía a una reunión familiar, apenas un día antes del inicio del Foro Económico APEC en Trujillo.

Tras forzarlo a ingresar en un vehículo fue torturado. Durante su cautiverio, los secuestradores llegaron a cortarle dos dedos para exigir a su familia el monto solicitado. Se dice que luego de que su familia para una suma de 400.000 soles fue liberado en la playa El Silencio, en Huanchaco.

El coronel Víctor Revoredo, quien encabezó la brigada que lo capturó, indica que este sujeto es la viva representación del tipo de delincuente sádico.

Durante su interrogatorio, el confeso criminal dijo:

¿Cómo te llamas?

-Jean Piero García Cipriano.

¿En cuántos secuestros has participado?

-En uno.

¿Cuál fue tu participación?

-Manejar la camioneta.

¿A quién secuestraron?

-A un empresario.

¿Cuánto te dieron?

-12 mil soles

 ¿Quién te dio la orden?

-Jhonsson

¿Y ahora a quién iban a secuestrar?

Ahorita no, no me graben…

Este sujeto fue capturado a las 2.10 de la madrugada en la avenida Camino real Mza. 22, lote 10, Trujillo, en el marco del operativo policial Cautivito I.

Fue más de un mes de trabajos y diligencias de investigación. Por la complejidad del caso se solicitó al Poder Judicial su detención preliminar. Llegamos a este sujeto por información y en coordinación con la SIE-PNP de Trujillo, a cargo del capitán Crino Zalon Villacres, explicó Revoredo.

Detalló que durante el registro personal se le encontró dos cartuchos de dinamita. El delincuente presentaba una orden de detención preliminar vigente por secuestro y extorsión y estaba solicitado por el Juzgado de Investigación Preparatoria de La Libertad.

El detenido fue puesto a disposición del área de secuestro de Trujillo. Por este caso ya habían sido arrestados otros cuatro individuos, entre ellos un amigo que lo acompañó el día que fue perpetrado este delito que conmocionó a la población trujillana.

OTRO SECUESTRO EN LIMA. Un hombre dedicado al rubro de la construcción civil fue raptado a plena luz del día y a pocos metros de la comisaría de Monserrate, en el Cercado de Lima, por una presunta banda de delincuentes, según captaron las cámaras de vigilancia del sector.

5 Trome Secuestro

Pierina Escobar, esposa de la víctima, presentó la denuncia ante la Dirincri en la avenida España, solicitando la intervención de las autoridades para conseguir la liberación de su marido, identificado como Brayan Daniel Chávez.

El hecho ocurrió la tarde del último lunes 27 de mayo, alrededor de las cinco de la tarde, en los exteriores de su vivienda, cerca de la comisaría de Monserrate. “En el video se ve que varias personas se lo llevan; no sabemos nada de él hasta ahora”, señaló la mujer.

En las imágenes captadas por las cámaras de seguridad se aprecia como Brayan Daniel Chávez, llega a su domicilio en su motocicleta, pero es interceptado por dos hombres y dos mujeres, quienes tras un forcejeo lo llevan del lugar con rumbo desconocido.

En el video se aprecia como las féminas le arrebataron sus pertenencias, mientras el hombre se aferraba a la puerta de su vivienda. La moto quedó tendida en el suelo.

TEME POR SU VIDA

Pierina aseguró que su esposo no había recibido amenazas ni estaba involucrado en actos ilícitos. “Vivimos tranquilos y no tenemos problemas con nadie. No sé por qué nos han hecho esto. Temo por mi vida y la de mis hijos, que son menores de edad”, expresó.

Se presume que el hecho guarde relación con un problema familiar.