Richard Swing postula al Senado con el Partido Demócrata Verde

Richard Swing —Richard Javier Cisneros Carballido, en su DNI— vuelve a la agenda política y mediática.

Esta vez aparece como candidato al Senado, con el número 10, por el Partido Demócrata Verde del polémico Alex Gonzáles.

Cercano al expresidente Martín Vizcarra, saltó a los informes periodísticos por el escándalo de las contrataciones irregulares con el Estado durante ese gobierno.

LIGADO A VIZCARRA

El caso surgió tras una denuncia periodística en mayo de 2020 que reveló que Cisneros recibió nueve órdenes de servicio por un total de S/175 mil para brindar charlas motivacionales y de liderazgo, pese a no cumplir con el perfil requerido. Dos de estos jugosos contratos fueron otorgados en abril de 2020, en plena crisis sanitaria por la pandemia.

Lo obtuvo sin un perfil técnico claro: no posee estudios superiores ni técnicos registrados en Sunedu.

El caso escaló tanto que terminó rozando al propio expresidente.

En octubre pasado, la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema analizó el recurso de apelación presentado por el Ministerio Público contra la resolución que declaró improcedente continuar la investigación preparatoria contra Martín Vizcarra en el marco del caso Richard Swing.

El Poder Judicial negó en febrero ampliar por ocho meses el plazo de investigación contra el exmandatario por la presunta intromisión indebida en la contratación de Richard Cisneros, alias “Richard Swing”, en el Ministerio de Cultura entre 2018 y 2020.

Hoy Swing postula al Senado por el Partido Demócrata Verde.

¿VUELVEN LOS ESCÁNDALOS?

El cantante y motivador que agitó la escena política vuelve por un cargo público. La Fiscalía sostiene que sus vínculos con altos funcionarios facilitaron el acceso a contratos públicos sin sustento técnico. Él, como siempre, lo niega todo. Pero el caso sigue abierto. Ese trasfondo judicial y mediático es clave para entender quién es Richard Swing. Y por qué su candidatura al Senado en 2026 no pasa desapercibida.

Así funcionará el nuevo Senado: claves del reglamento que define sus funciones y facultades

El Congreso de la República publicó este jueves 13 de octubre el reglamento que define la organización, funciones y atribuciones del nuevo Senado, la cámara que contará con 60 integrantes y formará parte del sistema bicameral que entrará en vigencia con las Elecciones Generales 2026.

A través de la Resolución Legislativa N°006-2025-2026-CR, se indica que los representantes del Senado son elegidos por un periodo de cinco años y que su número «puede ser incrementado mediante ley orgánica».

Además, se precisa que, conforme al artículo 134 de la Constitución, el Senado no puede ser disuelto. Durante el interregno parlamentario que se produzca por una disolución constitucional de la Cámara de Diputados, “el Senado no entra en receso y ejerce plenamente sus atribuciones constitucionales, sin menoscabo de sus recursos administrativos, de personal y presupuestales”.

Funciones y autonomía

El reglamento precisa que el Senado, que constituye una unidad ejecutora dentro del pliego presupuestal del Congreso de la República, es el encargado de ejercer la función legislativa, de control político, de representación y las demás que establece la Constitución.

Entre sus atribuciones, los senadores pueden revisar los proyectos de ley aprobados por la Cámara de Diputados, con la facultad de ratificarlos, modificarlos o rechazarlos. Esta revisión actúa como un segundo filtro antes de la promulgación de una norma y cumple con los fines propios de la cámara alta.

También ratificará tratados en materia de derechos humanos, soberanía, defensa nacional y obligaciones financieras del Estado.

Asimismo, señala que su sede se ubica en la ciudad de Lima, donde se realizan sus sesiones, salvo que, por razones de fuerza mayor vinculadas al resguardo de la integridad de sus miembros, estas deban efectuarse en otro lugar.

«Los recintos e instalaciones del Senado son inviolables. Ninguna autoridad ni fuerza pública puede ingresar a ellas sin autorización previa y expresa del presidente del Senado», se lee en el documento.

32 congresistas tendrán el privilegio de postular al Senado sin tener el mínimo de edad

Los congresistas acaban ratificar la reforma sobre la bicameralidad y una de las trampas es que un grupo de 32 congresistas actuales podrán postular al futuro Senado, sin cumplir con el mínimo de 45 años. Una forma de privilegio sobre todos los demás ciudadanos.

El dictamen de la reforma, que ya fue aprobado en primera y segunda votación, establece en el artículo 90 que “para ser senador se requiere haber cumplido 45 años al momento de la postulación o haber sido congresista o diputado”.

Es decir, para las elecciones generales del 2026 los actuales congresistas cumplirían este segundo requisito, con lo cual ya estarían exonerados del mínimo de edad que sí se les exigiría al resto de ciudadanos peruanos.

De acuerdo con la verificación de la fecha de nacimiento del total de 130 legisladores, son 32 los congresistas que tendrán menos de 45 años para la primera quincena de abril del 2026, para cuando se estima la primera vuelta.

Es decir, estos 32 tendrán el privilegio de postular al Senado, sin el mínimo de los 45 años. ¿Quiénes son?

Los privilegiados de la contrarreforma

En Fuerza Popular, seis legisladores no tendrán 45 años para la primera vuelta del 2026. Aún así tendrán el privilegio de poder aspirar al Senado: Rosangella Barbarán (32 años para el 2026), Tania Ramírez (35), Vivian Olivos (39), César Revilla (39), Enrique Castillo (39) y Arturo Alegría (38).

En la tienda de Avanza País también habrá cinco privilegiados para poder aspirar al Senado con menos de 45 años: Alejandro Cavero (34), Adriana Tudela (38), Diana Gonzales (34), Diego Bazán (35) y Yessica Amuruz Dulanto (39).

En Acción Popular, este mismo privilegio aplica para tres: Darwin Espinoza (43), Wilson Soto Palacios (41) y Elvis Vergara (42), además del renunciante de la bancada Ilich López Ureña (41).

En Alianza Para el Progreso los beneficiados con esta reforma serían Elva Julón Irigoin (36) y Cheryl Trigozo Reátegui (39). Súmese a dos de Podemos Perú: Heidy Juárez Calle (42) y Francis Paredes Castro (44).

En Perú Libre votaron en contra de la bicameralidad en la primera votación, pero de ser ratificada la reforma, siete se verían también beneficiados: Kelly Portalatino (42), María Taipe (44), Margot Palacios (43), Américo Gonza (44), Abel Reyes Cam (42), Janet Rivas (42) y Wilson Quispe (44).

Los otros que también resultarían beneficiados son Alex Flores Ramírez (42), Silvana Robles Araujo (42), Noelia Herrera Medina (42), Alejandro Muñante (39), Sigrid Bazán Narro (26) y José Jerí Oré (40).

En los parlamentos anteriores hubo también jóvenes a quienes podría favorecer esta contrarreforma, como es el caso de Alberto de Belaunde (40 años para el 2026), Daniel Olivares (44), María Bartolo de Áncash (33), Marisa Glave (44) o Richard Acuña (42), pero la regla sigue siendo sumamente restrictiva y de privilegio para un grupo muy cerrado, en relación a la gran mayoría de ciudadanos peruanos.